Triatlón, Morcuera y Canencia

Este sábado tuve la oportunidad de presenciar mi primer triatlón en la Casa de Campo de Madrid, donde hubo varias pruebas de las Wild Wolf Triathlon Series a lo largo de todo el día.

Alo me comentó hace unas semanas que él y Nacho iban a participar en una de las pruebas de distancia olímpica, y como llevaba ya tiempo con ganas de ver uno en vivo en directo para saber qué me encontraré cuando, espero que pronto, participe en uno, para allá que me fui a verles.

Me fui desde casa con la bici de montaña y llegue con bastante tiempo para poder estar un rato con ellos antes de que empezasen. El ambiente era muy bueno, incluidas las chicas que se veían por allí ;-)
Y como había tanto deportista, en vez de tiradores de cerveza, en el stand de Wild Wolf había tiradores de bebidas isotónicas :-)

Sobre las 17:00 comenzó la prueba donde participaban Nacho y Alo. Tenían por delante 1.500 m de natación, 40 km de bici y 10 km de running. Fátima, la novia de Nacho, que ya se conoce bien como va esto, fue la que se encargó de localizar los sitios buenos donde colocarnos para seguirles fácilmente.

Primero la natación:

Alo justo antes de salir

Nacho al salir del agua

Luego la bici:

Nacho

Alo

Y finalmente la carrera:

Vaya cracks!! Y como disfruté de la prueba!! La próxima espero disfrutarla desde dentro.


Y el Domingo quedé con Jose, el extraterrestre (como le llamo yo desde el cariño por como le pega el tío a la bici) para desde Pedrezuela ir hasta Miraflores, subir Morcuera y del otro lado Canencia.

Desde el principio me encontré con muy buenas sensaciones, y con el subidón del triatlón del día anterior, ya desde las primeras subidas hacia Miraflores le fuimos dando zapatilla. Y así continuamos en la Morcuera, que parecía que íbamos a apagar un fuego!

Parecía que hubiese una prueba ciclista de la cantidad de gente que había subiendo y bajando el puerto, en bici de carretera y de montaña.

Comenzamos la subida adelantando a un grupo de 4 ó 5 ciclistas. Unos metros más adelante teníamos a otro de más edad que iba muy tranquilo, a su ritmo. Yo iba a rueda de Jose y me extrañó que no se separase para adelantarle cuando estábamos a un metro escaso para alcanzarle.
De repente, ZASSSSS, se lo comió..... Afortunadamente el pobre hombre no se cayó, aunque un buen susto sí debió de llevarse. El que si se fue al suelo fue Jose, pero sin ninguna consecuencia.

Me paré a esperarle y nos volvieron a pasar los 4 ó 5 ciclistas que acabábamos de adelantar. Uno de ellos no pudo contener la risa y decirle a Jose que esa situación de ir subiendo y llevarse a alguien por delante no la había visto nunca...

Jose le pidió varias veces perdón al hombre y le explicó que no le había visto porque iba con la cabeza hacia abajo, a pesar de haberle visto antes cuando nos sacaba unos metros.

Nos pusimos de nuevo en marcha al mismo ritmo vivo que antes, adelantando otra vez al grupo de ciclistas, salvo a uno que ya se había descolgado del resto e iba por delante.

Poco después le alcanzamos también e hicimos un tramo juntos charlando con él, hasta que en el km 13, donde comienzan unas rampas más duras, decidió bajar el ritmo y dejarnos marchar.

Jose, como siempre hecho un toro, iba delante en todo momento. En algunos momentos me sacaba un par de metros pero no tiraba más para que pudiera seguirle. Aunque esta vez le hubiera costado sacarme la ventaja de otras veces.

Durante el resto de la subida continuamos pasando a algún ciclista más. Llegando ya al final, uno de los que adelantamos iba en bici de montaña y era conocido de Jose. A pesar de ir en bici de montaña pegó un tirón, solo para picar a Jose, que tardó cero coma en reaccionar respondiendo con otro.

Como él mismo dijo, eso le pasó factura porque en la parte final ya no iba delante mio y le costaba seguir el ritmo. Pero cuando paramos arriba se tomó una barrita y ya no tuvo más momentos de flaqueza jejeje.

Controlé el intervalo de subida desde Miraflores a la Morcuera en el Garmin y la media que ha salido son 14,7 km/h.

Después de la bajada y el llano-falso llano, donde también le dimos un poco de estopa, en Canencia repusimos agua y comenzamos la subida de este puerto.

Agua no tratada... Tendremos cagalera?

Esta vez subimos algo más tranquilos y en algunas rampas sufrí un poco, pagando el esfuerzo anterior. Pero según el Garmin el ritmo tampoco fue demasiado lento porque desde Canencia también controlé el intervalo hasta la subida y sale una media de 16,3 km/h. Aunque sale una media más alta que en Morcuera, la dureza es mucho menor. Desde arriba ya solo quedaba bajada y llaneo hasta Pedrezuela.

El track:




En connect garmin con los intervalos:

Stay tunned!!